ROGER HODGSON. Plaza de Toros (Murcia) (8-7-2015)


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Era la primera vez que venía Roger Hodgson a Murcia, el principal compositor de SUPERTRAMP, a una Plaza de Toros que a pesar del pegajoso calor que hacía ese día, congregó a un buen montón de gente, de hecho, estaba casi llena. Hodgson se mostró en todo momento agradecido y muy cómodo en el escenario, hablando entre canción y canción, y dedicando temas a gente que se lo había pedido, algunos venidos de sitios tan recónditos como Bélgica o Noruega. El escenario no era nada del otro mundo, tan sólo unos adornos de unos maceteros con unas palmeritas, pero lo que sí que parecía de otro mundo era la banda que le acompañaba, que hizo que disfrutáramos de esos hits que todos habíamos venido a escuchar. La media de edad superaba los 40 años, y aunque el público empezó sentado en sillas de plástico, la gran mayoría acabó de pie bailando con hits que sonaban a la perfección, con una voz, la de Hodgson, que se encuentra en perfecto estado, además de su pericia tanto cuando se enfundaba la guitarra (eléctrica o acústica) como cuando se sentaba al piano. El concierto se dividió en dos partes: una primera en la que cayeron muchos de sus hits: “Take the long way home”, “School”, “Breakfast in America”, “Lady” o “The logical song”, además de alguna de su etapa en solitario como “In jeopardy”. Tras esta primera parte, dijo que se tomaban quince minutos de respiro, para afrontar una segunda parte en la que cayeron el resto de sus himnos, como “Crazy”, “Lord is it mine”, “Don’t leave me now”, “Child of vision”, “Dreamer” o “Fool’s overture”, para cerrar un maravilloso concierto al que aún le quedaría un bis, y es que el público murciano estaba totalmente entregado y emocionado ante uno de los más importantes artistas de la música de los últimos 50 años

Instructions for Scoring: Add the scores for each item 1-5 (total possible score =25). ED Severity Classification : viagra No adverse effect levels in the rat and dog were 60 mg/kg and 15 mg/kg respectively..

. Para el bis se dejaron “Two of us” y “Give a little bit”, para terminar definitivamente con “It’s raining again”. Uno de los conciertos del año, y es que además de una banda impresionante, el público fue a escuchar un repertorio de canciones con las que crecimos muchos.

A destacar: El público que empezó sentado y acabó de pie bailando y coreando las canciones.

ROGER HODGSON. Sala Arena (Madrid)

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Una sala totalmente llena para ver a uno de los mejores compositores del siglo XX, toda una leyenda. Un personaje, que al frente de Supertramp, ha facturado de las mejores canciones que se han compuesta en la década de los 70. Y venía solo, pero es que no le hacía falta nadie. Él solo llenaba el escenario, tanto al teclado como a la guitarra acústica de 12 cuerdas, sonando como una banda completa, y además, el público, totalmente entregado desde el primer momento, no dejó de cantar todas y cada una de las canciones durante todo el concierto. Estaba claro que había que asistir a este concierto dejándote los prejuicios en casa, y seguro que muchos «indies» me retirarían el carnet por asistir a este concierto. Pero no me arrepiento. Es más, disfruté como un enano durante todo el rato, que fue más bien largo, de más de una hora. Se supone que venía a presentar el último disco en solitario, aunque de este tocó bien pocas. Se dedicó a tocar las viejas y conocidas canciones que todo el mundo quería escuchar. Empezó con The Meaning, y tocó además: Take The Long Way Home, Dreamer, It´s Raining Again, Two Of Us, Easy Does, Sister Moonshine, The Logical Song, Breakfast In America, Hide In Your Shell, Give A Little Bit, Fool´s Overture, School,.. haciendo las delicias de todos los asistentes, y es más, se mostró agradable en todo momento. El único rato de aburrimiento y sopor fue cuando salió Carlos Núñez a acompañarle con la flauta en dos canciones. Nos presentó también un souvenir que había comprado en Japón, una especie de caja de batería electrónica, un extraño instrumento de percusión de cuyo funcionamiento nos hizo una pequeña demostración, tras la cuál, invitó a alguien del público a subir a acompañarle a un tema a este extraño cahivache electrónico. Antonio, el voluntario, lo hizo muy bien y fue muy aplaudido por el público, que se lo estaba pasando en grande. Fue bonito volver a disfrutar de esos viejos éxitos de Supertramp.