Concierto que Martin Newell ofreció con motivo de su 50 cumpleaños en el Colchester Arts Centre, el 14 de junio de 2003 (a pesar de que su cumple fue en marzo), y que nos llega ahora en formato vídeo gracias a la inmortalización del mismo que hizo el realizador Michael Cumming, en un DVD que se puede pillar a través del Bandcamp de Newell. El de los CLEANERS FROM VENUS, que no se suele prodigar mucho en directo, ofreció en una vieja iglesia de Colchester acondicionada como Centro Artístico, un concierto de más de hora y media, unos 100 minutos, en el que se alternó entre la guitarra y el piano, además de algún tema con la mandolina. En algunos momentos del concierto se hizo acompañar en el escenario por Nelson (THE BROTHERHOOD OF LIZARD) y por dos colegas de Colchester, Grahame Andrew y Paul Rutterford. En el repertorio hubo éxitos de toda su discografía, como “Julie Profumo” (con la que empezó), “Clarendon Lane”, “Sugar Cane”, “The wicked witch”, “Drowning butterflies”, “The world strikes one”, “Straight to you boy”, “Victoria Grey”, “A woman & some whiskey”, “Before the hurricane”, “Home counties boy”, “Miss Van Houtens’ Coffee Shop”, “When we were a thing”, etc… además de otras nuevas como “The golden afternoon”, “Grenadine and blue”, “My lost weekend”, “Better than anything”, “You made it rain”,… e incluso alguna versión, como “Pinball” (Brian Protheroe), “Walk away” (Matt Monroe) y el “Some girls are bigger than others” (THE SMITHS),… para terminar con una propia como aclamado bis, “The beer elves”, y un “Happy Birthday” que se coreó desde el público para dar por terminada esta magnífica celebración de su 50 cumpleaños.
El mismo día 31 de diciembre cuando me dispongo a maquetar el número anual del fanzine, me entero de que BIGOTT tienen nuevo álbum, y claro, error mío al no haberlo comprobado antes cuando ya sabemos de la incontinencia discográfica de Borja y los suyos, y es que desde hace un tiempo van a álbum por año… Antes de las uvas me pongo a escucharlo a través de su Bandcamp y caigo en la cuenta de que es… un discazo! Son diez canciones que suman solo 24 minutos pero de escucha altamente agradable. Canciones compuestas con enormes dosis de talento e inspiración, y bañadas por multitud de influencias, de hecho, en algún momento me llegan a recordar a THE CURE y a SPARKS. El disco comienza sonando a shoegaze de los ‘90s para luego volver más hacia un synthpop ochentero, abstracto y experimental. Clarín se atreve a cantar en el tema que da título al álbum, y hasta hay tiempo para regalarnos un par de temas instrumentales: la ensoñadora “Interstellar Radio Transmission” a mitad del disco, y la psicodélica ‘À tout à l’heure,’ con la que cierran un precioso trabajo que se va disfrutando más a cada nueva escucha.
Apenas sin tiempo para digerir su precioso segundo álbum, ‘Still life’ y antes de que acabe el año, MASSAGE nos ofrecen un nuevo EP con cuatro nuevas canciones (dos más para quién pueda hacerse con la versión en vinilo 12”). Para este ‘Lane lines’ se han reunido junto con el productor Andrew Brassell (Susanna Hoffs), y han sacado estas maravillosas gemas de indiepop luminoso de radiantes melodías y cristalinas guitarras.
He de reconocer que desconozco por completo la discografía en solitario del célebre batería de QUEEN, y que si llego aquí y me he hecho con un disco suyo ha sido por otro camino: buscando el autor de la impresionante canción que sale en los créditos iniciales de la divertidísima película de Terry Jones, ‘Absolutamente todo’ (2015), protagonizada por Simon Pegg y Kate Beckinsale, y que cuenta con voces de los Monty Python y de Robin Williams. Pues bien, ese tema, “Absolutely anything” me flipó cuando lo escuché, recordándome al mismísimo David Bowie, y resulta que era de Roger Taylor, al que nunca antes había escuchado en solitario (supongo que por pereza). Pues eso, el tema de la peli sale en ‘Outsider’, que no es un recopilatorio, sino el sexto álbum de estudio del de QUEEN, que incluye doce canciones, todas nuevas, a excepción de la citada “Absolutely anything”. También hay una versión de “The clapping song”, el éxito de Shirley Ellis de 1965. El contenido del disco es acojonante: una mezcla entre THE FLAMING LIPS y el David Bowie más cósmico. Se trata de un disco compuesto y grabado durante el confinamiento, interpretando el propio Taylor casi todos los instrumentos que suenan, habiendo muchos más pianos y sintetizadores de corte espacial u orquestal que baterías, algo curioso por ser quién es. El álbum gira en torno a la soledad, la marginalidad y el aislamiento. Su voz me recuerda mucho a la de Wayne Coyne (THE FLAMING LIPS). Es un disco que no suena a rancio en absoluto; más bien todo lo contrario, resulta bastante recomendable, un ejemplo de que no siempre hay que dejarse llevar por los prejuicios.
Mis favoritas:
1. Absolutely anything. 2. We’re all just trying to get by. 3. Outsider.
Tras su sorprendente álbum de debut, ‘The garden of inescapable pleasure’ (Shelflife, 2020), el cuarteto californiano LAVENDER BLUSH vuelve con un nuevo EP en vinilo 7” con tres exquisitas joyas del mejor shoegaze que se hace actualmente. “Sundays” es un potente y envolvente tema que me recuerda a una mezcla entre MONOGRAPH, THE PROCTORS y THE HOBBES FANCLUB. “Lullaby” y “Come along” son de aire más reposado.