Tal era el listón de su anterior álbum ‘You are the quarry’ (sin duda, el mejor de su etapa en solitario), que esta vez se ha quedado lejos de su propio techo, y hasta llega a decepcionar. 12 cortes para 50 minutos lo que convierte las canciones en excesivamente largas (alguna hasta supera los 7 minutos de duración), monótonas y lineales por momentos, y demasiado rock, con falta de inspiración evidente. Hasta resultan más interesantes las circunstancias que han rodeados el disco, que el propio contenido musical que encierra. Estas circunstancias son por ejemplo que el disco ha sido grabado en Roma, el productor elegido ha sido el mítico Tony Visconti, y ha colaborado hasta el mismísimo Ennio Morricone. La portada es tan bonita como provocadora, y es que parodia a las de Deutsche Grammophon. Las letras del disco son las más sexuales desde hace tiempo. Pero a la hora de la verdad, cuando dejamos las circunstancias y las anécdotas de un lado, y nos adentramos en el contenido musical, lo que nos encontramos es con un disco espeso y aburrido, que necesita de varias escuchas, con pocos momentos reseñables, quizás ese tema lento que figura en segundo lugar, “Dear god please help me”, que destaca como el mejor tema del álbum, con ese órgano maravilloso, y la orquesta de 37 músicos con Morricone al frente.
Mis favoritas:
1. The youngest was the most loved.
2. Dear god please help me.
3. You have killed me.