Derek Jarman nace en Northwood, Middlesex, Inglaterra, el 31 de enero de 1942, hijo de un oficial de la RAF (originario de Nueva Zelanda) y de una estudiante de Artes (nacida en la India). Ha vivido en Pakistán e Italia. Desde 1960 estudia en el King’s College London. Durante su infancia fue importante el papel que tuvo Andrew Davis, su profesor de Inglés, que hizo que Jarman amara la literatura inglesa y se obsesionara con la obra de Shakespeare. En 1961 el joven prodigio obtuvo el Premio de Plástica de la Universidad de Londres en la categoría amateur. Luego pasa cuatro años en la Slade School of Art desde 1963. Tenía su estudio en Butler’s Wharf, Londres. Hacia 1967 había participado ya en seis exposiciones (tres de ellas individuales) y había diseñado cinco escenografías. En 1970, un encuentro completamente casual con un hombre en un tren lo puso en contacto con Ken Russell, quien le encargó el diseño escenográfico para su próximo film, ‘The Devils’. Durante la década de los 70, Jarman realizó una serie de films en super 8. En 1972, este artista integral publicó su primer libro de poemas, ‘A finger in the fishes mouth’ y en 1976 estrenó su primer largometraje en 35 mm, ‘Sebastiane’. El 22 de diciembre de 1986 le fue diagnosticado el virus VIH, y fue notorio por dar a conocer este hecho más tarde. Su enfermedad le llevó a mudarse a Prospect Cottage, Dungeness, cerca de la planta nuclear. Murió de SIDA en 1994.
El cine de Derek Jarman es tan alucinante como desconocido para el gran público, al menos en nuestro país, y es que su cine independiente nunca anduvo cerca de los circuitos comerciales. De hecho, siempre encontraba muchas dificultades para encontrar productores para realizar sus películas, y es que algunas llegaron a tener menos presupuesto que las películas llamadas de serie b o bajo presupuesto. Los productores buscan dinero, y sus películas no se lo iban a dar. Además, los productores tenían que trabajar muy duro, por eso él tenía que estar constantemente encima de todo, pendiente de todos los detalles.
Era una persona decepcionada con la situación política de Inglaterra durante la legislatura de Margaret Thatcher, y de esa Inglaterra deprimida sacó inspiración para escribir algunas de sus películas. Fue bastante criticado y atacado por los periódicos, el gobierno y el parlamento, incluso lo declararon personaje no deseado en Inglaterra. Otras de las inspiraciones fue su homosexualidad declarada, que también era palpable en sus películas.
Derek Jarman fue un personaje polifacético, y es que además de las películas que rodó, también filmó un buen montón de cortos, y vídeo-clips, y ha sido también productor, actor, escritor, escenógrafo, pintor (especializado en collage) y director de ópera.
Daba mucha importancia al lenguaje visual. Ha hecho vídeoclips para artistas como THE SMITHS, MARIANNE FAITHFULL, PET SHOP BOYS, MARC ALMOND, BRYAN FERRY, etc… y es que Jarman siempre ha estado unido al pop, y para él siempre ha sido muy importante la música en sus películas, para las cuáles muchas veces ha trabajado con THROBBING GRISTLE, el grupo post-punk encabezado por Genesis P. Orridge, un fiel admirador suyo.
Me considero un adorador incondicional de toda la obra de Jarman, después de ver la mayoría de sus películas, algunos cortos, y algunos de los vídeo-clips promocionales que hizo. Le conocí a finales de los 80, cuando lo entrevistaron y hablaron de su obra en el programa Metrópolis, de La 2 de TVE, programa que grabé en su momento en vídeo, y que aún conservo! También fue entrevistado en La Edad de Oro, el programa que presentaba Paloma Chamorro en TVE en los años 80, y que recientemente han recuperado en parte. Me encanta esa sensibilidad con la que filma, ese cuidado por los detalles, por el mensaje, por la fotografía, por los colores, por los paisajes, por la comunicación. Sus películas a veces resultan difíciles de entender, pero penetran fácilmente en tus entrañas, en el campo de tus emociones, con esa estética ochentera de la época que vivió. Sus escenas, los personajes, su forma de filmar, impacta irremediablemente en el espectador.
Derek Jarman es el líder de la vanguardia británica, de filmografía visualmente opulenta y estilísticamente arriesgada. A través de ella se opuso de manera desafiante a las tradiciones literarias y teatrales del cine británico. Derek Jarman se dejó influir por las películas de Michael Powell y Emeric Pressburger, e igualmente por las de Jean Cocteau y Kenneth Anger. Al igual que este último, Jarman mostró su fascinación por la violencia, el homoerotismo, la representación gay y las imágenes mito-poéticas. Llegó a compartir con el espectador las noticias sobre su estado de salud, luego de que le diagnosticaran el SIDA, en filmes como ‘The Garden’ (1990) y ‘Blue’ (1993). También investigaba historias de origen homosexual en sus múltiples biopics nada convencionales: ‘Sebastiane’ (1976); la anacrónica ‘Caravaggio’ (1986); la recontextualizada obra de Marlowe ‘Eduardo II’ (1991) y la minimalista y teatralizada ‘Wittgestein’ (1993).
Su cine se consagra más a la imaginería impactante y surrealista que a los imperativos de la narrativa y la caracterización. Resulta ilustrativo su comentario acerca de uno de sus filmes más radicales: “‘The Last of England’ trabaja con la imagen y con el sonido, un lenguaje que está mucho más cercano de la poesía que de la prosa. Su historia se cuenta felizmente en imágenes mudas, en contraste con el cine del presente, limitado por la palabra”.
A la manera del celebrado cineasta underground Stan Brakhage, Jarman registraba en celuloide todas sus actividades. Hizo la crónica de buena parte de su propia vida en super-8 e incorporó este material, luego de inflarlo a 35 mm, a sus películas personales y antinarrativas. Las imágenes de Jarman sobre jóvenes en dramáticos paisajes rocosos le prestan cierto aire romántico a ‘The Angelic Conversation’ (1985), una exposición no lineal de los sonetos de Shakespeare. ‘The Last of England’ presenta una visión airada y emotiva de una Gran Bretaña urbana y desolada, en la cual se intercalan tomas de Jarman escribiendo en su cuarto junto con surrealistas retablos de violencia y degradación. Su última película, ‘Blue’, fue la más anticonvencional de todas: la pantalla permanece azul mientras escuchamos voces y sonidos.
El pictorialismo cultivado por los franceses del cinema du look y por otros autores es evidente en ‘Caravaggio’ (1986), donde no sólo biografiaba al maestro del manierismo en la creación de sus famosos lienzos, sino que también concebía cada escena al modo de lienzos en movimiento. Su filme más popular creaba facsímiles cinematográficos de los más famosos lienzos del pintor, y entrecortaba la narración con evidentes anacronismos. Con entrenamiento y estudios en las bellas artes, Jarman fue siempre el diseñador de los sets en que rodaba, además de crear vestuario para la English National Opera y para el Royal Ballet a finales de los años sesenta. Realizó sus primeros cortos en super-8 mientras trabajaba como diseñador de sets para Ken Russell (‘The Devils’, ‘Savage Mesiah’) y logró completar 16 cortos en cinco años, a principios de los setenta. Continuó su carrera como pintor incluso cuando ya dirigía sus propios largometrajes, los cuales, por supuesto, transparentaban su preocupación pictórica con la composición. Los largometrajes, cortos y video clips de Jarman muestran a un artista profundamente preocupado por la historia y la contemporaneidad británica. En ‘Jubilee’ (1978), icono del cine punk, la reina Isabel I es conducida en viaje por una Inglaterra futurista donde la violencia y la anarquía se lo han tragado todo; en ‘The Tempest’ (1979) adapta de manera irreverente a Shakespeare; mientras que en ‘War Requiem’ (1988) superpuso los poemas de Wilfred Owen a la música de Benjamin Britten, en un poderoso ensayo sobre la inutilidad de la guerras pasadas, mientras se comentan los desastres causados por el SIDA.
Como pintor está catalogado entre los más originales de su generación, el mayor de los visionarios apocalípticos británicos desde William Blake. Sus mejores obras plásticas parecen ser aquellas que pueden verse como extensión del desastre presentado en su filme ‘The Last of England’, y las producidas como consecuencia de la angustia que le causaba la política de Margaret Thatcher. Existen dos diarios publicados, Modern Nature y Smiling in Show Motion’, que recuentan los últimos años de su vida. Escribió muchos otros textos relativos a su pintura.
Los filmes más reconocidos del británico Derek Jarman se ubican en el contexto de la vanguardia post-1968 y de la identity politics que, ya en los años 80 y 90, celebraba la marginalidad y se dirigía a un público con interés especial en verse reflejado en la pantalla a través de los filmes con tema gay, lésbico, punk, o dedicados a cronicar la vida de las minorías raciales.
Durante su último año de vida (1993), Jarman realizó algunas de las obras más importantes que haya entregado algún artista británico de los últimos tiempos. En ese año tuvieron su premiere dos de sus últimas películas: la simpática, intelectual y cálida ‘Wittgenstein’, y ese espectáculo minimalista que es ‘Blue’, reflejo de la ceguera que le había causado la enfermedad y de sus más profundas reflexiones. ‘Glitterburg’ es considerado su filme póstumo: se trata de un hora de collage con películas caseras hechas en super-8, entre 1970 y 1986, un retrato nostálgico e íntimo de tiempos felices. A unas semanas de su muerte se publicó el libro Chroma, su meditación sobre el color. Fue enterrado en New Romney, no lejos de sus amados jardines de Prospect Cottage, Dungeness, con la capa dorada real que se usó en su película ‘Edward II’, bajo una lápida que solo dice una palabra: “Controversialist”.
Alex Cox escribió para The Guardian, en febrero de 2004, la siguiente valoración sobre el legado de Jarman: “Fui a ver ‘Sebastiane’ cuando se estrenó porque era el primer filme de ficción donde se hablaba en latín y porque, según se decía, era el primer filme que había pasado la censura del British Board of Film Censors que mostraba penes erectos. El filme era tal vez un tanto lento, pero contenía algunos buenos chistes y no temía tratar con los aspectos sádicos del erotismo masculino. (…) Después vinieron muchos otros largometrajes; entre la realización de uno y otro intercalaba sus cortos, los vídeos musicales, la pintura, algo de actuación, libros y jardinería. (…) ¿Pero acaso la obra de Jarman tuvo influencia en otros cineastas? En la mía por lo menos sí tuvo influencia. (…) En otra ocasión, recuerdo haber visto anunciada ‘Blue’, su película final, pero la excluí de mi lista mental pensando que era un experimento sin sentido. Terminé viéndola, o debo decir escuchándola, pero el caso es que me atrajo poderosamente no sólo la falta de imagen sino la riqueza extraordinaria de la banda sonora. La ausencia de lo visual parecía haberlo liberado y la película termina siendo tan atrayente y complicada como cualquier otra, y así me quedé fascinado con todo lo que estaba escuchando, hasta el final. (…) Jarman no dejó ni un centavo, ¿qué cineasta de veras independiente tiene dinero? Nos legó sólo una cabaña de pescadores en Dungeness, algunos canteros de flores y unas cuantas películas. Pero estas últimas todavía tienen el poder de intrigarnos y ejercer su fascinación sobre nosotros. Son verdaderos asaltos al cine “decente”, molotov lanzados en el tonto esquema beige del naturalismo que ahora mismo nos enreda y sofoca”.
CORTOS (como DIRECTOR):
Studio Bankside (1970)
Journey to Avebury (1971)
Miss Gaby (1972)
Garden of Luxor (1972)
Andrew Logan Kisses the Glitterati (1972)
A Walk of Møn (1973)
Tarot (1973)
Sulphur (1973)
Stolen Apples from Karen Blixen (1973)
Art of Mirrors (1973)
Ula’s fete (Ula’s Chandalier) (1974)
Fire Island (1974)
Duggie Fields (1974)
Devils at Elgin (1974)
Sebastian Wrap (1975)
Picnic at Rays (1975)
Sea of Storms (1976)
Geralds Film (1976)
Art and the Pose (1976)
Jordan’s Dance (1977)
Every Woman for Herself and all for Art (1977)
The Pantheon (1978)
In the Shadow of the Sun (1980)
T.G.:Psychic Rally in Heaven (1981)
Sloan Square: A Room of ones Own (1981)
Jordan’s Wedding (1981)
Pontormo and Punks at Santa Croce (1982)
Ken’s First Film (1982)
Pirate Tape (1983)
Waiting for Waiting for Godot (1983)
B2 Tape (1983)
Imagining October (1984)
Aria (Segmento titulado «Depuise le Jour» del film producido por Don Boyd) (1987)
L’ Ispirazione (1988)
PELÍCULAS (como DIRECTOR):
Sebastiane (1976)
Jubilee (1977)
The Tempest (1979)
Conversaciones Angelicales (1985)
Caravaggio (1986)
The Last of England (1987)
War Requiem (1989)
The Garden (1990)
Eduardo II (1991)
Wittgenstein (1993)
Blue (1993)
Glitterbug (1994)
VÍDEOS MUSICALES:
MARIANNE FAITHFUL «Broken english», «Witches’ song», y «Ballad of Lucy Jordan» (1979)
STEVE HALE «Stop the radio» (1983)
LORDS OF THE NEW CHURCH «Dance with me» (1983)
JIMMY THE HOOVER «My heart beats» (1983)
CARMEL «Willow weep for me» (1983)
WANG CHUNG «Dance hall daze» (1983)
ORANGE JUICE «What presence» (1984)
MARC ALMOND «Tenderness is a weakness» (1984)
BRYAN FERRY «Windswept» (1985)
THE SMITHS «The queen is dead», «Ask me» y “Panic” (1986)
EASTERHOUSE «1969» y «Whistling in the dark» (1986)
BOB GELDOF «I cry too» e «In the pouring rain» (1987)
MIGHTY LEMON DROPS «Out of hand» (1987)
PET SHOP BOYS «It’s a sin» y «Rent» (1987)
PET SHOP BOYS ‘40 Minutos de filmación de su gira’ (1989)
PATTI SMITH «Little emerald bird» (hecho con material de la película ‘The Garden’) (1993)
SUEDE «So young» (1993)
Algunos textos extraídos de webs de internet, y de la entrevista a Derek Jarman en ‘Metrópolis’ de TVE, en 1988.