Tercer álbum de este grupo canadiense que son el mejor grupo de pop de Canadá capaz de heredar fielmente el sonido de los BEACH BOYS, y es que estos chicos hacen un sunshine pop con orquestaciones propias de los BEACH BOYS de la década de los 70, de Harry Nilsson o Randy Newman, y buena prueba de ello es esta obra de arte de pop orquestado en la que han colaborado más de 24 componentes en este disco, donde encontramos, además de las excelentes armonías vocales creadas por el propio grupo, secciones de cuerdas, metales, y otros instrumentos, como pianos, hammonds, banjos, mandolinas, farfisas, moogs, percusiones varias,..
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. todo ello para aumentar la gama cromática de las canciones, que ya son luminosas de por sí, pero es que con toda esta maravilla de arreglos seguro que Van Dyke Parks o Sean O’Hagan se morirían de envidia, pues han facturado un disco realmente bonito, lleno de delicados y minuciosos detalles, y es que hay que quitarse el sombrero ante un disco de una belleza tan suprema,… algunos temas suenan como nanas mágicas, como canciones de las que Brian Wilson se sentiría orgulloso de componer. A pesar de las orquestaciones, los temas rondan los 3 minutos de duracion, así que estamos ante un disco de pop radiante y mayúsculo.
Mis favoritas:
1. Try telling that to my baby.
2. He heard his song.
3. The night and i are still so young.