Un disco sensacional de lo que se hace llamar indietrónica, a cargo de un supergrupo formado por Ben Gibbard (DEATH CAB FOR CUTIE) y Jimmy Tamborello (DNTEL y FIGURINE). Aunque viven en distintas ciudades (Seattle y Los Angeles), se las apañan para facturar un disco impecable, donde mezclan nítidas guitarras y melancólicas voces sobre tejidos electrónicos, dando como resultado hits como “Such great heights” o el resto del disco, que se encuentra a la altura de este temazo, sin dejar espacio a los temas de relleno; orfebrería electrónica e intuición melódica se encuentran y acoplan a la perfección en las 10 canciones que contiene este disco, a la que añaden una amplia gama de sonoridades y magistrales arreglos.
Mis favoritas:
1. Such great heights.
2. Recycled air.
3. Brand new colony.