Segundo álbum de uno de los grupos del momento, los tan aclamados por la crítica, el grupo de moda según los semanarios británicos,… pero más allá de todo lo que puedan decir de ellos, lo mejor es centrarse en el disco y en las canciones, y así podrás disfrutar un disco que contiene 11 maravillosas canciones de punk-rock en estado puro, 11 potenciales singles, algunos de los cuáles ya han sido plastificados, y es que no hay temas de relleno en este disco, sino ese sonido “strokes” al que ya nos hemos acostumbrado y que tanto nos gusta: esa voz de Julian Casablancas tan característica sobre esas guitarras brillantes que trotan sobre ritmos que te hacen bailar. Una docena de buenos temas honestos, inmediatos, espontáneos, descarados,… y que demuestran que lo del primer disco iba más allá del hype, y es que estamos ante un gran grupo que fabrica excelentes canciones… 33 minutos de THE STROKES sonando a… THE STROKES, caminando sobre su propia identidad, con ritmos pegadizos y estribillos adhesivos, ingredientes fundamentales de todo buen tema de pop, rock, rock´n´roll o como lo quieras llamar

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Mis favoritas:

1. You talk way too much.
2. Reptilia.
3. The end has no end.